Adquirir vehículos que funcionen con gas o energías alternativas será incentivado por el Ministerio de Transportes a través de su Plan de Ayudas de renovación de flotas de transporte.

La conversión de vehículos diésel a tecnología dual diésel-gas también será objeto de ayuda, no así la compra de nuevos vehículos de combustible diésel, que, a diferencia de otros países europeos, quedará excluida de estos planes de ayuda.

Desde la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España se ha puesto en el foco los intereses del transporte en España, poniendo como ejemplo a Italia, Alemania y varios estados miembros de la Alemania, donde ya desde hace algunos años existen planes de ayuda con objeto de modernizar las respectivas flotas de transportes sin tener que excluir necesariamente el combustible diésel, dado que los nuevos vehículos Euro 6 suponen un gran avance en cuanto a respeto medioambiental y disminución de emisiones de hasta el 90% en óxidos de nitrógeno y carbono se refiere si los comparamos con los vehículos de mayor antigüedad.

El Ministerio de Transportes de España no tiene previsto ningún tipo de ayuda para la renovación de vehículos diésel de las flotas transportistas a otros vehículos diésel más modernos, las ayudas quedarán por tanto supeditadas únicamente bien a la compra de vehículos que hagan uso de energías alternativas o bien a aquellos vehículos que puedan ser susceptibles de ser transformados en tecnologías duales.

Dado que a día de hoy existe una oferta más bien reducida en relación a vehículos eléctricos y vehículos de hidrógeno en el sector del transporte de mercancías y pasajeros de largo recorrido, y además estos se encuentran en una fase embrionaria y de experimentación, el Ministerio de Transporte da por hecho que la gran mayoría de ayudas irá destinada a vehículos propulsado por gas en todas sus variantes (GNC y GNL), cuya reducción de emisiones es hasta de un 15% menor que las de su equivalente en diésel.

Tal y como recoge la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España, la escasa red de gasineras existentes en la actualidad (apenas un centenar en toda España), junto a la novedad de la tecnología, hace que la gran mayoría de transportistas no terminen de ver con buenos ojos la adquisición de vehículos propulsados a gas. Es por esta razón que se estima que el plan de ayudas llevado a cabo por el Ministerio de Transporte ponga el foco en la hibridación tecnológica dual de los actuales camiones diésel con el fin de que estos puedan ser operativos con combustibles alternativos, especialmente con gas natural siendo así una solución que permita implantar la transformación dual de los actuales vehículos.

El objetivo es que este tipo de hibridación tecnológica tenga un coste asequible para las empresas transportistas y posibilitar de este modo la contemplación de esta tecnología a la hora de renovar su vehículo, impulsando a su vez la expansión continuada de nuevos espacios de suministro debido a su mayor demanda.

Como ya sucedió con el Plan PIMA Transporte en el año 2015, el Ministerio de Transporte pretende también fomentar mediante un plan de ayudas, la conversión en chatarra de los vehículos más antiguos aún sin que las empresas transportistas tengan la necesidad de adquirir un vehículo nuevo como contraprestación. De esta manera, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España confía en flexibilizar los requisitos respecto al anterior plan ampliando los fondos destinados a este propósito.